RSS

LA GASTRONOMIA DE CANTABRIA ILUSIONADA CON MICHELIN

Un año después, la gastronomía de Cantabria, ilusionada con Michelin


Día 22 de noviembre de 2012, a las 20.30 horas. El Hotel Ritz de la capital de España se convertirá en el epicentro de la mejor gastronomía peninsular: Michelin presenta la guía para España y Portugal de 2013 y los mejores chefs y restaurantes de España verán recompensada la excelencia de su oferta gastronómica con la concesión de una, dos o tres estrellas Michelin. A estas alturas, apenas a cinco días de conocer las novedades que traiga la centenaria publicación (en España desde 1929), los grandes chefs y empresarios de hostelería padecen el ‘hormigueo’ propio de quien está a la espera de una gran noticia. Porque Michelin no renueva estrellas, sino que cada año concede este galardón. Es un pequeño matiz, pero importante a la hora de festejar la presencia en la zona más noble de la guía más acreditada del panorama nacional e internacional. Conseguir una estrella es un gran logro; y perderla, un gran decepción.
365 días después, los profesionales de los mejores restaurantes de Cantabria, en particular, el sector hostelero en general y los aficionados a la buena mesa volverán a estar más pendientes que nunca de los acontecimientos, de las noticias que lleguen, recordando con satisfacción la noche en la que fue anunciado en Barcelona que seis restaurantes de esta región eran distinguidos con una estrella: El Cenador de Amós, El Serbal, Los Avellanos, El Nuevo Molino, Solana y Annua.
Fue un acontecimiento histórico, difícil de repetir, pero no imposible, ya que un análisis con perspectiva de la alta cocina en Cantabria permite llegar a conclusiones positivas: los chefs están ganando presencia en el contexto nacional e internacional y los principales medios de comunicación especializados han focalizado más su mirada hacia la región para valorar qué pasa en Cantabria.


Un año intenso

En el transcurso de los doce meses, un restaurante, Los Avellanos dirigido por Jesús de Diego, dio un paso atrás y decidió, por el contexto económico, reorientar su establecimiento a un estilo italiano que, implícitamente, le sitúa fuera de la carrera de las estrellas.
El resto de las ‘estrellas’ han vivido un año intenso que, por su condición les ha convertido en la imagen de la cocina regional. Ya en enero fueron la imagen de Cantabria en Fitur. Más adelante han participado en actividades con Lexus Santander, con la Universidad de Cantabria en los cursos de verano de Laredo, con la Consejería de Turismo en actividades de promoción, en congresos como los recién celebrados en Soria sobre las setas y en México. Precisamente en el país centroamericano se encuentra ahora Óscar Calleja mostrando su cocina en unas jornadas en la localidad de Puebla, y todo ello después de haber dirigido el equipo español en una competición en República Dominicana.
Finalmente, los chefs con estrella y sus restaurantes también han crecido técnicamente ya que se ha podido observar que sus propuestas han evolucionado, se han renovado porque si algo tienen en común son sus ganas por progresar y seguir dando satisfacciones al cliente.


Presencia de restaurantes cántabros en la Guía Michelín (1929-2012)


Mesón Marinero (Castro Urdiales): 1995-1986.
El  Molino (Puente Arce): 1975-1996. Como El  Nuevo Molino: 2009.
Colasa (Comillas): 1978-1989.
La Sardina (Santander): 1980-1985.
Río Asón (Ramales): 1990-2007.
San Román de Escalante: 1994-2003.
Cenador de Amós  (Villaverde de Pontones): 1995.
El Serbal (Santander): 2003.
Solar de Puebla (Maoño-Santa Cruz de Bezana): 2006-2010.
Los Avellanos (Torrelavega): 2007-2012.
Solana (Ampuero): 2012.
Annua (San Vicente de la Barquera): 2012.

http://hosteleria.eldiariomontanes.es/noticias/un-ano-despues-la-gastronomia-de-cantabria-ilusionada-con-michelin.html

  • Digg
  • Del.icio.us
  • StumbleUpon
  • Reddit
  • RSS

0 comentarios:

Publicar un comentario